domingo, 21 de diciembre de 2014

DESTINO

Y para acá o allá                                                                      
y desde aquí otra vez
y vuelta a ir de vuelta y sin aliento
y del principio o término del precipicio íntimo
hasta el extremo o medio o resurrecto resto de éste a aquello o de lo opuesto
y rueda que te roe hasta el encuentro
y aquí tampoco está
y desde arriba abajo y desde abajo arriba ávido asqueado
por vivir entre huesos
o del perpetuo estéril desencuentro
a lo demás
de más
o al recomienzo espeso de cerdos contratiempos y destiempos
cuando no al burdo sino de algún complejo herniado en pleno vuelo
cálido o helado
y vuelta y vuelta
a tanta terca tuerca
para entregarse entero o de tres cuartos
harto ya de mitades
y de cuartos
al entrevero exhausto de los lechos deshechos
o darse noche y día sin descanso contra todos los nervios del misterio
del más allá
de acá
mientras se rota quedo ante el fugaz aspecto sempiterno de lo aparente o lo supuesto
y vuelta y vuelta hundido hasta el pescuezo
con todos los sentidos sin sentido
en el sofocatedio
con uñas y con piensos y pellejo
y porque sí nomás
Oliverio Girondo

sábado, 13 de diciembre de 2014

LAK-BERNA: Lucía Serrano (Argentina)

LAK-BERNA: Lucía Serrano (Argentina): Poemas de Lucia Serrano traducido en varios idiomas TORMENTAS Desatada la furia, todo fue interior. Cr...

FEDERICO GARCÍA LORCA - NO TE LLEVES TU RECUERDO


No te lleves tu recuerdo.
Déjalo solo en mi pecho.
Temblor de blanco cerezo
En el martirio de enero.
Me separa de los muertos
Un muro de malos sueños.
Doy pena de lirio fresco
Para un corazón de yeso.
Toda la noche en el huerto
Mis ojos, como dos perros.
Toda la noche, corriendo
Los membrillos de veneno.
Algunas veces el viento
Es un tulipán de miedo.
Es un tulipán enfermo,
La madrugada de invierno.
Un muro de malos sueños
Me separa de los muertos.
La niebla cubre en silencio
El valle gris de tu cuerpo.
Por el arco del encuentro
La cicuta está creciendo.
Pero deja tu recuerdo
Déjalo solo en mi pecho.
No te lleves tu recuerdo


miércoles, 29 de octubre de 2014

                
 ANSIABA ROBARTE EL CORAZÓN

Cuando nos quedábamos a solas en la azotea,
me emocionaba buscar esa razón ausente,
las luces trasnochadas de un corazón hueco.
Eléctrico y siniestro,
aproveche de todas las mentiras escondidas,
y como un gato, roce en tu alma, paredes,
cercos, medianeras, portones abiertos
a todas las maravillas.
Buscando entre las sombras,
encontré las llaves que abrirían esperanzas,
buenos humores, certidumbres de otra existencia.
Como un ladrón, tenia un único apetito,
ansiaba robarte el corazón.

 (del libro de Lucía Serrano: ”Blues para la Corona”) 

martes, 28 de octubre de 2014

PEQUEÑO TESTAMENTO



Esto que de noche fulgura
en el casco de mi pensamiento,
huella nacarada de babosa
o esmeriles de vidrio pisoteado,
no es lámpara de iglesia o de taller
que alimente
clérigo rojo o negro.
Sólo este arco iris puedo
dejarte como testimonio
de una fe que fue combatida
de una esperanza que ardiera más lenta
que un duro leño en la chimenea.
Conserva su ceniza en el espejito
cuando, extintas las lámparas,
la sardana se vuelva infernal
y un sombrío Lucifer baje sobre una proa
del Támesis, del Hudson o del Sena
sacudiendo sus alas de betún semitruncadas
de cansancio a decirte: es la hora.
No es una herencia, no es un amuleto
que ampare del golpear de los monzones
sobre la telaraña de la memoria,
pero una historia dura tan sólo en la ceniza
y persistencia es sólo la extinción.
Exacto era el indicio: quien lo ha reconocido
no puede fracasar al encontrarte.
Cada uno reconoce a los suyos: el orgullo
no era huida, la humildad no era
vileza, el tenue resplandor difuminado
allá abajo no era igual al de un fósforo.

EUGENIO MONTALE

miércoles, 22 de octubre de 2014

MUJER DEL AIRE


Se abren las llanuras,
crecen los ríos,
cae de los cielos
sangre nueva
y vamos dispuestos
a cumplir nuestros
sueños.
No importa
el crepúsculo
de esta sed que
desciende silenciosa
a mis costados.
Mujer del aire,
criatura confundida
entre los vivos,
atmósfera de las orillas,
justiciera tierra
de los hombres fuertes.
Imaginarios cauces
alimentan mi vida.
 
LUCIA SERRANO (del libro "CARAMELO")                                                                                                                                  

lunes, 6 de octubre de 2014

PRESENTACIÓN DEL LIBRO DE POESÍA DE LUCIA SERRANO "CARAMELO"

(última presentación el 27 de septiembre 2014 en el Museo de la Reconquista - Tigre)











sábado, 20 de septiembre de 2014

EL ANGEL DE LA SANGRE

Por caminos del alba motinera
-allá es verano, dura piedra ardida-
maduran en sus manos las granadas
que van a reventar al mediodía.
Qué extraño que la sangre no esté quieta
y el mismo Arco de la Sangre en sangre
se vaya y se desangre sobre un campo
propicio a la azucena de la sangre.
Qué extraño que la sangre no destiña
ni se solidifique ni se estanque,
oh, viva flor al filo de la tarde
que en alba acabará, recién nacida,
que todo lo que toque vuelva sangre.
¡Toro vital! ¡Paloma conmovida!
Corre la sangre al Arco de la Sangre.

RAÚL GONZÁLEZ TUÑÓN

“LA MUERTE EN MADRID” 1939

martes, 16 de septiembre de 2014

Este melón es una rosa - Marosa di Giorgio

Este melón es una rosa,
este perfuma como una rosa,
adentro debe tener un ángel
con el corazón y la cintura siempre en llamas. 
Este es un santo,
vuelve de oro y de perfume
todo lo que toca;
posee todas las virtudes, ningún defecto,
Yo le rezo,
después lo voy a festejar en un poema.
ahora, sólo digo lo que él es:
un relámpago,
un perfume,
el hijo varón de las rosas.

Foto: Este melón es una rosa -  Marosa di Giorgio

Este melón es una rosa, 
este perfuma como una rosa, 
adentro debe tener un ángel 
con el corazón y la cintura siempre en llamas. 
Este es un santo, 
vuelve de oro y de perfume 
todo lo que toca; 
posee  todas las virtudes, ningún defecto, 
Yo le rezo, 
después  lo voy a festejar en un poema. 
ahora, sólo digo lo que él es: 
un relámpago, 
un perfume, 
el hijo varón de las rosas.

jueves, 28 de agosto de 2014

EN TI PENSABA

En ti pensaba, en tus cabellos
Que el mundo de la sombra envidiaría,
Y puse un punto de mi vida en ellos
Y quise yo soñar que tú eras mía.

Ando yo por la tierra con los ojos
Alzados -¡oh, mi afán!- a tanta altura
Que en ira altiva o míseros sonrojos
Encendiólos la humana criatura.

Vivir: -saber morir-; así me aqueja
Este infausto buscar, este bien fiero,
Y todo el Ser en mi alma se refleja,
Y buscando sin fe, de fe me muero.

JOSE MARTI

domingo, 17 de agosto de 2014

CARILDA OLIVER LABRA - CUBA 1922

CON DESDÉN Y ORO
Voy a verle
en cualquier sitio,
él pedirá un ron para mezclarlo con mis pupilas;
yo, el crepúsculo,
y me traerán una lágrima.
Voy a verle:
a las seis de la tarde,
cuando los combatientes repasan sus fusiles
y los adúlteros se acuestan con mariposas;
a las seis de la tarde,
sin luna,
cuando por los cines naufragan las divorciadas
y los obreros comienzan a bañarse.
A las seis,
con temblor y relente,
con bochorno,
ciega como leche y sed,
voy a verle.
Azogue en su mano,
una extraña,
qué poco de suerte,
subterráneo para reírme a carcajadas.
Con un traje amarillo como si renunciara
a la tristeza
voy a verle.
Tendré cuidado
no sea, que, al abrirme, estalle el sollozo
y comprenda que delinco.
Seré cauta,
debo mentir: "adiós, alguien espera",
y al levantarme con desdén y oro
crecerán los pulmones donde le respiro
y para que no muera del todo
lo atraparé en mi verso.
Voy a verle
-he dicho en la hermosura-
mientras recupero el ala que no sirve
y llueven los nísperos,
divagan las márgenes rumorosas;
voy a verle
y nos desbaratábamos a besos
y el libro se quedaba a medias
y luego quién creía en los relojes
si aquí se olvidó su boca del binomio de Newton

sábado, 26 de julio de 2014

                               PARA ESPERARTE

He reservado para esperarte, la atmósfera de una sala de conciertos,
antes de un evento importante.
Resucité nuestras conversaciones cuidadosamente reprimidas y
alejé  posibles tristezas.
No cité a ninguna penumbra y sin embargo la niebla de las
tumbas nos rodeaba, atenuada por lo extraño de una verdad
disimulada.
Áspera la monotonía de nuestros cerebros, recordaba otros
encuentros, donde los disparates aumentaban la desarmonía.
La voz vuelve cruel y desaparecen los remordimientos.
Amor, tomemos aire para hablar tranquilos.
Busquemos todo lo que no ha sucedido.
Comentémonos los últimos sucesos que vivimos.
Después, sentémonos a conversar y bebamos apetecibles
bebidas que hasta hoy entre nosotros estuvieron prohibidas.
Alguien en este mundo, lo sé, comprenderá las ausencias.
En silencio, bajo mi cabeza, cierro los ojos y agradezco
transportar la gracia que me han concedido.
Imperturbable, mecánica y cansada, vulgar para que nadie
sospeche, evoco deseos imposibles e imagino realizarlos.
En todos los tiempos cuando se trataba de bajar, regresé por la
escalera gateando para no bajar tanto.
Para esperarte, había previsto la mitad del camino recorrido, un
punto cierto para seguir avanzando.


                                                       Lucía Serrano 

miércoles, 9 de julio de 2014

EL GORILA

¿Por qué ese gorila grave,
Quieto, manso, casi absorto
Me afecta penosamente
Como si su rudo rostro
Me confiara un informe
Que a pesar mío recojo?
Pero no. Si escucho bien,
De su silencio borroso
No asciende a mi expectación
Mensaje mientras ahondo
Los abismos que le hunden,
Abrupto, peludo, romo,
en lontananzas de selvas,
Centurias y terremotos.
El gorila, de repente...
¡Si no está triste! No es hosco
Su horizonte, no hay memorias
Que le entrecierren los ojos.
Y con una ligereza
De acróbata da a su modo
No aprendido un espectáculo
De jaula, para mi asombro
La más fiera soledad:
Sumida en presente solo.


JORGE GUILLÉNEspaña-1893
De "Clamor"

miércoles, 2 de julio de 2014

De MAROSA DI GIORGIO

Está en llamas el jardín natal (fragmento)

10

A veces, cuando el verano se volvía demasiado intenso —era todavía una niña, en la edad del huerto—, armábamos los lechos, fuera; entonces, todo parecía tan extraño. Mis familiares volaban un poco; pero, luego, se adormecían; yo quedaba escudriñando el cielo; por entre las estrellas, las antiguas naves seguían su lid. O me sobresaltaba el galope de un caballo a lo lejos, muy a lo lejos, el ladrido de los perros, en un lugar sin nombre, su eterno canto. Y estaban la hierba salvaje, el orégano, la violeta, la gallina blanca que pone un huevo negro, tal vez, desde allí —quizá— saldría un perrito, una criatura humana; un viejo pariente podría resucitar de allí.
Pero, más allá del hechizo familiar, todo se cumplía otra vez, la noche era infinita y azul y las naves partían. A la guerra de Troya.

jueves, 26 de junio de 2014

RODOLFO ALONSO

POCAS PALABRAS
(De 70 POEMAS DE 35 AÑOS)

suelto
sobre la gracia del peligro
un viento sobre
poco a poco
mis pasos

cantan los días fatigados
alzan su luz
su dura infancia

tú te pones de pie
entre dos fuegos
con la cabeza al aire

pero no hay ya abandono
ni paz

una lluvia pequeña
deshace los recuerdos

algo te duele
algo te canta
también
a ti

agua

¿es que sólo estás hecha
de silencio?

viernes, 13 de junio de 2014

SEGUNDO RECUERDO

                                               "...rumor de besos y batir de alas..."
                                                               G.A.Bécquer"

También antes,
mucho antes de la rebelión de las sombras,
de que al mundo cayeran plumas incendiadas
y un pájaro pudiera ser muerto por un lirio.
Antes, antes que tú me preguntaras
el número y el sitio de mi cuerpo.
Mucho antes del cuerpo.
En la época del alma.
Cuando tú abriste en la frente sin corona, del cielo,
la primera dinastía del sueño.
Cuando tú, al mirarme en la nada,
inventaste la primera palabra.

Entonces, nuestro encuentro.
RAFAEL ALBERTIEspaña-1902
De “Huesped de las nieblas

jueves, 8 de mayo de 2014

EL TIEMPO ROTO



Es una tarde más. Ante mis ojos
y tus ojos otoño nos ha puesto
sus lágrimas de luz envejecida
y ha roto en nuestras manos sus espejos.

Un leve corte este cristal de ocaso,
una pequeña herida en nuestros dedos
como estigma nos deja. Todavía
hay una golondrina en el alero.

Pasas las hojas lentamente. Miras
a la sombra inclinar su dócil cuerpo
entre nosotros. Oyes un rumor
que envuelven unas plumas de silencio.

Miro de pronto una fotografía
anclada entre las páginas, reflejos
de un diario vivir. Stephen Hawking
en su silla de ruedas rompe el tiempo.

¿Qué somos tú y yo ahora, en esta linde
de la tarde caída hacia el invierno?
A esta humilde materia sufridora
del amor, ¿qué sentido le daremos?

Sólo un repliegue mínimo, humillado
por tan inútil sacrificio, hueco
sin otra realidad que absurda suma
de dos cargas eléctricas a un tiempo
imaginario que se curva y pone
entre nosotros su feroz misterio.

LEOPOLDO DE LUISEspaña-1918
De “Elegía con rosas en Bavaria y otros poemas


domingo, 27 de abril de 2014

EL ENEMIGO

Mi juventud no fue sino un gran temporal
Atravesado, a rachas, por soles cegadores;
Hicieron tal destrozo los vientos y aguaceros
Que apenas, en mi huerto, queda un fruto en sazón.

He alcanzado el otoño total del pensamiento,
y es necesario ahora usar pala y rastrillo
Para poner a flote las anegadas tierras
Donde se abrieron huecos, inmensos como tumbas.

¿Quién sabe si los nuevos brotes en los que sueño,
Hallarán en mi suelo, yermo como una playa,
El místico alimento que les daría vigor?

-¡Oh dolor! ¡Oh dolor! Devora vida el Tiempo,
Y el oscuro enemigo que nos roe el corazón,
Crece y se fortifica con nuestra propia sangre.

CHARLES BAUDELAIRE

miércoles, 16 de abril de 2014

LA ÚNICA HERIDA - ALEJANDRA PIZARNIK

poema de ALEJANDRA PIZARNIK
LA UNICA HERIDA
¿Qué bestia caída de pasmo
se arrastra por mi sangre
y quiere salvarse?
He aquí lo difícil:
caminar por las calles
y señalar el cielo o la tierra.
A. Pizarnik.

domingo, 13 de abril de 2014

POEMAS DEL GRUPO DE ESCRITURA TIGRE - COORDINA LUCIA SERRANO

A VECES

Escribo desde la noche
el color del silencio,
camino sobre el vino derramado
con un cuerpo blanco,
y me inclino bajo el aire
a pensar en los ángeles.
Alguien paga mi rescate,
sobre el polvo gris de los escaparates.
Es el filo del ávido murmullo
de los dioses conocidos,
el que a veces,
me lleva al precipicio.
Sucede que hay palabras
tan oscuras,
que sólo pueden vivir en el poema.

                                          Lucía Serrano


SILENCIO DE MADRUGADA
                                
                                  las luciérnagas dejaron de aullar
                                                      René Villar

Descansan las luciérnagas a nuestros pies,
la escucha del alma es compañía absoluta,
e infinito el placer que la ciencia no cautiva.
Silencio que trasciende las luces tenues
del suntuoso día.
Tierna música que enamora a las ninfas
en la noche callada.
De la fuente plateada, se asoma
el fresco aroma de este extraño corazón
que se instaló en mis entrañas.
Me enamora el silencio mensajero.
No iré a ningún sitio.
Me quedaré aquí,
embriagada por la luz de las luciérnagas.


                                                        Lucía Serrano

 MARIONETAS
De raíz, avanzan  
las hojas
en sus direcciones.

Espacio grupal,
ocaso del escenario,
discusiones.

Fragmentarias
defensas
entre hombres.

Ese horizontal,
marionetas
al viento en contradicción.

Manos ocultas
dirigidas en recuerdos,
flotan poéticamente.

                                   Norberto Demarco
CUMPLIR AÑOS

Voces
           de
                  felicidad.
         La propia
                       huella,
              atravesando
             el ojo
de la veladura.

Reluciente oxígeno.

                                   Norberto Demarco

 CUMPLIR AÑOS

Cumplir años, señala  tiempo, vida,
 partida,
                  otro otoño,
                                         mar,
                                                   recuerdos.
Sin respuesta,
 tu última pregunta  resuena
en  cavernas del  alma con  eco  universal.

Rizos rubios, pintorcito rosado,
                  cabeza calva, camisón blanco;
                                    el devenir  en ese tramo.
Vuelas  el tiempo
                                   blanco delantal  de amor,
 alimento-letras  sembraste,
           aprendiendo,  enseñando  bondad
¡Quien  marcó surcos ,
                                                eterniza  la  vida!
                                         

                                                               Ricardo Guimaraynz


NOSOTROS

Equidad                                  justicia,
aguas mansas lavan sangres malas,
ocultamiento                    
                               miedo,
                                                   dolor,
purpurea que nuestras manos marcara.
Aún te sueño como te veía,
como te escuchaba en los saludos,
de vecino a vecino,
                                   al transeúnte
o en risas niñas, por todos cuidadas.
Aún te huelo con aroma a verde,
la tecnológica aldea tribal se desvanece
Aún te sueño posible, pueblo mío.      
                                
                                         Ricardo Guimaraynz
 EL BULTO


El bulto en la entrada
en su colchón
de cartón.
En la humedad
color de león
su refugio, su vida,
su armazón
de cartón.
La cabeza enrollada,
su cuerpo tieso
en la mañana helada
en su caparazón
de cartón.
Los pies con estigmas,
los brazos delgados,
los latidos leves
de su corazón,
durmiendo en su casa
de cartón.


Edgardo D’Alvia

 CUMPLIR AÑOS

Cumplir años ardorosos,
apasionados, amigables
cerca del fuego tomando mate
mientras sopla el viento con olor a yodo.

Cumplir años sinuosos, infinitos,
rodeados de zarzas y espinas,
también de hermosas madreselvas
para consolarnos.

Cumplir años efímeros
ladrones de placeres
repletos de fotos amarillas
de esquinas esperanzadas
entre la ardiente soledad.

Cumplir años como décimas de
segundo, como pájaros raudos
que jamás volverán.

Cumplir años como íconos
con estaciones llenas de partidas
y llegadas,
con relojes que siempre atrasan,
mientras suceden los encuentros
y los desencuentros en el andén de la vida.

Algún día seremos
solo recuerdos.
Tantas candelas apagadas en el tiempo
hasta ser un ensueño del pasado.

Edgardo D’Alvia

CUMPLIR AÑOS

Almas encarceladas
por agujas del reloj,
encarnan el refugio ausente
de millones ataviados por el brillo infinito
del paso del tiempo que aprisa
enloquece sus propios caminos.
Destellos inquietantes de incertidumbre
frente a la maquinaria sigilosa
detienen las miradas
de un mundo absorto por las sombras.
Ley que arrastra
el inhumano hastío de la muerte
presente siempre en el futuro.

                                                      Jorge Montironi

 INOCENCIA INTERNA

Testigo insomne,
acude
frente a llamados del olvido.
El sonido de tu voz
altera mis sentidos
que siempre esperarán encontrarte.

Torbellinos del déspota
de frío caminar entre la niebla
iluminan la aciaga nostalgia
de tu desaparición.
Siempre estoy triste.

                                   Jorge Montironi